El Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia, financiado por los Fondos NextGenerationEU de la Unión Europea, pretende paliar el impacto económico y social provocado por la irrupción de la COVID-19, así como apoyar la recuperación económica. Las medidas que constituyen dicho plan permitirán la realización de reformas estructurales los próximos años y posibilitarán que la recuperación de la economía tras la pandemia no deje a nadie atrás.
El Mecanismo para la Recuperación y la Resiliencia (MRR) es el núcleo del Fondo de Recuperación, que financia inversiones y reformas estructurales para un futuro más verde, digital, igualitario y cohesionado.
El Plan contempla en el Componente 19 «Plan Nacional de Competencias Digitales», encuadrado en la política palanca VII «Educación y conocimiento, formación continua y desarrollo de capacidades», diversas actuaciones encaminadas a garantizar la inclusión digital, avanzando en el desarrollo de las competencias básicas de la ciudadanía para que todas las personas puedan aprovechar las oportunidades sociales, económicas y ambientales que ofrecen las nuevas tecnologías.
En el Componente 19 se encuentra la Línea de Inversión 1 «Competencias digitales transversales» y dentro está la Medida 3 consistente en la «Formación de la ciudadanía en materia de competencias digitales». Dicha Medida se encuentra vinculada al cumplimiento de los objetivos números 286 y 288. El objetivo n.º 286 establece que, respecto a los fondos destinados a esta Medida, «al menos el 75 % del presupuesto se deberá haber comprometido para acciones bajo la inversión de formación de la ciudadanía en competencias digitales». El plazo establecido para el cumplimiento de este objetivo llega hasta el cuarto trimestre de 2023. Por su parte, el objetivo n.º 288 establece que, para el 30 de junio de 2026, España deberá tener «2.600.000 ciudadanos formados en competencias digitales, de acuerdo con las acciones de la medida».
Dentro de este objetivo, el programa “Competencias Digitales para la Infancia” (CODI) tiene la meta de formar a 950.000 niños, niñas y adolescentes en situación de vulnerabilidad, ofreciendo formación básica en competencias digitales a niños y niñas de 9 a 13 años y adolescentes de 14 a 17 años, priorizando a aquellos en situaciones de pobreza, vulnerabilidad, zonas rurales, con discapacidad o ex tutelados. No obstante, los programas estarán abiertos a la participación de toda niña, niño o adolescente en el rango de edad para garantizar la inclusividad y evitar la estigmatización.